jueves, 12 de julio de 2007

Destino: Check-in and Gate

"Stansted, uno de los aeropuertos de Londres"
Un lugar dónde nadie pregunta de donde vienes. Pensando siempre en el destino, sin mirar atrás. ¿Te dejas algo?, ¡No! es que a mí el pasado me importa y un recuerdo es un pequeño gran tesoro. Todos los que estamos aquí pasamos, pero nadie puede prolongar su estancia.
Quizás la vida tenga algo de ésto. Lo único que poseemos es lo que ha ocurrido, pero nos ilusionamos trayendo al presente el futuro ya presente en nuestra cabeza. El futuro del que hablo es tan cercano que en el momento que lo terminamos se convierte en pasado.
Separados de la naturaleza humana, el espíritu. La tecnología nos ha separado también de un tiempo y un espacio humano. Quizás sea un simple cambio de escala en éstos dos factores, debido a un paso más en la evolución económica.
Un medio relativamente nuevo, único y exclusivo. En él se desarrolla un concepto temporal falso de acuerdo a el lado más salvaje y primitivo del hombre (el más auténtico).
Podrían llevarnos a la otra terminal en coche de caballos. O sería aún mejor ir corriendo y que Foster nos hubiera mezclado con nuestra compañera la flora.
Me fascina la tecnología, pero no la corrupción capitalista. La conclusión que saco me entristece, pero creo que los aeropuertos tienen algo de éso.

2 comentarios:

Diego Fernández Magdaleno dijo...

Querido Roberso: espero que des cuenta aquí de tu viaje.
Besos,
Diego

lumaras dijo...

Que razon tienes. que bien descrito. que bonito y que duro a la vez.