miércoles, 13 de agosto de 2014

"No te rindas", Mario Benedetti

No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.

No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.

No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma
Aún hay vida en tus sueños.

Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo
Porque lo has querido y porque te quiero
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.

Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.

No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frío queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños
Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.

miércoles, 22 de febrero de 2012

domingo, 2 de mayo de 2010

domingo, 7 de marzo de 2010

Miguel Fisac

Mi amiga Lucía me ha enviado la siguiente entrevista de Miguel Fisac:





viernes, 5 de marzo de 2010

Anularán al idealista, automatizarán al práctico. Se recomienda actuar con inteligencia.

lunes, 14 de diciembre de 2009

jueves, 3 de diciembre de 2009

Gehry

Hace unas semanas ví un vídeo sobre Gehry y varios de sus proyectos. El vídeo se escuchaba en inglés y estaba subtitulado al francés, ya que lo extraí de la mediateca de la Escuela de Arquitectura de Nancy, donde estoy estudiando este año. Él mismo, cuando hablaba sobre el museo Guggenheim de Bilbao, dijo lo siguiente:

"Je n'aurais jamais cru que Bilbao pourrait se révéler un tel succés. Quand il a ouvert, j'étais très gêné et je me disais: Mon Dieu, qu'ai je fait?"